Activa la reflexión y el intercambio de experiencias por medio de conferencias, exposiciones, mesas de diálogo, talleres con expertos, instalaciones en el espacio público, rutas y visitas especializadas, presentaciones de libros y otros eventos.
Convierte a la ciudad de México en un poderoso atractivo cultural, turístico y ciudadano, al promover la reflexión sobre: vivienda, movilidad, espacio público, equidad, entre otros tema de interés urbano. Es el encuentro de la cultura a través de la arquitectura.
MEXTRÓPOLI 2025
REPENSAR LA VIVIENDA
El derecho a la vivienda se considera básico y universal. En este contexto, el Festival de Arquitectura y Ciudad MEXTRÓPOLI, tras doce años de reflexionar sobre la ciudad, lo público y, particularmente, el problema de la vivienda, se presenta como el momento y el espacio idóneos para el debate, la exploración de propuestas novedosas y la interacción entre el gremio arquitectónico, quienes participan también en el desarrollo de proyectos de vivienda, y la ciudadanía en general.
Entre 1925 y 1930, hace cien años, el programa de vivienda liderado por Ernst May construyó cerca de 12 mil unidades en la ciudad de Frankfurt. Cuatro décadas después, entre 1960 y 1964, Mario Pani y su equipo diseñaron y construyeron el Conjunto Habitacional Tlatelolco, también con cerca de 12 mil unidades de vivienda. El programa de vivienda que propone el actual gobierno federal de México tiene como objetivo principal la construcción de un millón de viviendas en lo que resta del sexenio, es decir, 83 veces Neue Frankfurt u 83 veces Tlatelolco, además de la implementación de programas de vivienda en renta para jóvenes.
Esta trascendental iniciativa subraya la necesidad de repensar la vivienda colectiva, algo que —teniendo como muestra solo los dos casos antes citados— ha sido la tarea central de la arquitectura por lo menos durante un siglo. Ante este panorama, se vuelve indispensable una exploración crítica con propuestas que aborden aspectos cruciales, como la mejor densidad urbana, las opciones tipológicas, la flexibilidad y el reciclaje tanto de espacios como de materiales.
Un millón de unidades en cinco años no es un reto menor. Pero repensar la vivienda implica, además, repensar lo común y lo público; replantear las maneras en que podemos imaginar nuestras ciudades en un momento histórico en el que hacerlo, tanto localmente como a nivel planetario, es urgente.